“Me encanta masturbar a una mujer
Ver como su cuerpo se estremece, sus
ojos se pierden y su respiración se
hace más forzosa. Me gusta jugar con
el ritmo y la velocidad, que mis dedos
dancen en su entre pierna, mientras mi
boca explora su piel, juguetea con sus
pezones, dando pequeños mordiscos;
sutiles pero apasionados.
Me gusta arrancarle gritos y una que
otra palabra sucia.
Me gusta que se despoje de todo
prejuicio y sea quien desea ser todo el
tiempo. Me gusta que entre la lujuria y
la pasion me desgarre, que se haga
mas frecuente su respiración, que arda
la piel y justo en el extasis del
momento, llegue al climax cortando
con un grito. Un grito diferente, uno
que es más silencio. Como si muriera
momentáneamente y despertara con
una sonrisa, una completamente
sincera.
Me encanta masturbar a una mujer,
por que cuando acaba, significa que
apenas empieza lo mejor.”
-Cristián David Bolívar-