#orquesta

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The Whalesong.

Adoras aquellas cosas extrañas, innovadoras, delicadas… Parece que las notas están escritas sobre pétalos de rosa o la arena del fondo marino. Tan trémulo, fino y relajante.

Vienen a mi cabeza las ondas que crea una piedra al ser lanzada al agua, que van desvaneciéndose hasta desaparecer. Cuando quiero tranquilizarme, me gusta pensar que mis problemas y agobios están en esa piedra y que al depositarse en mi interior, van desapareciendo poco a poco, sin causar ningún daño. Apenas una ondulación…

Vienen a mi las caracolas y el rugido del mar al chocar con los acantilados. Una ballena asomándose en la superficie marina, el olor a sal…

Es increíble como las palabras pueden cambiar el destinatario que, aunque secreto, brillaba en mi mente como un faro en la noche.

Caballero…

Sirena…

Encerraré mi mensaje en una botella y lo lanzaré lejos, esperando que las manos de una criatura mitológica lo alcancen y canten. Voces de antigua seducción que se pierden en la corriente. Creencias olvidadas…

Cuan extrañas pueden ser las palabras que no se comprenden. ¿Qué estarán diciendo? ¿Qué estaré diciendo? Ni yo lo sé ahora mismo, la coherencia y el sentido común parecen abandonarme a la par que la música avanza. Las trompas crean extrañas armonías en sus glisandos. Las tubas arañan el fondo marino, los bombardinos gimen de dolor… Todo se va perdiendo, en un eterno silencio.

De repente, una cajita de música viene a mi memoria para más de repente aún, desaparecer.

Los muertos aúllan, revolotean a mi alrededor. Tempus fugit, parecen gritar. Sus lamentos arrancan notas quebradizas a las cuerdas, hasta que el sonorotic tac de los timbales vuelve a poner en marcha el reloj, en su tempo, la orquesta sigue el rumbo…

Whalesong.

Cuatro vieiras me separan del final… Abandono mi rumbo, no quiero recorrerlas. No todavía.

Puedo esperar.

Cajas de música, leyendas del lejano oriente, armonías olvidadas, cantos antiguos como el tiempo, enarmonías, silencios…

Agua, mucha agua.

La caza. Todo es caos, dolor y sufrimiento, intento avanzar en un confuso vaivén hasta tropezar con mis inseguridades. Quieren tirar de mi y arrastrarme al fondo marino, al… ¿abismo?

Miedo.No sé que hacer. ¡GRITAR!

Y silencio.

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