#astrofisica

LIVE

Mounded, luminous clouds of gas and dust glow in this Hubble image of a Herbig-Haro object known as HH 45. Herbig-Haro objects are a rarely seen type of nebula that occurs when hot gas ejected by a newborn star collides with the gas and dust around it at hundreds of miles per second, creating bright shock waves.

Credit: NASA, ESA, and J. Bally (University of Colorado at Boulder); Processing: Gladys Kober (NASA/Catholic University of America)



This comparison view shows puffing dust bubbles and an erupting gas shell — the final acts of a monster star.

AG Carinae is formally classified as a Luminous Blue Variable because it is hot (blue), very luminous, and variable. Such stars are quite rare because there are not many stars that are so massive. Luminous Blue Variable stars continuously lose mass in the final stages of their life, during which a significant amount of stellar material is ejected into the surrounding interstellar space, until enough mass has been lost that the star has reached a stable state.

AG Carinae is surrounded by a spectacular nebula, formed by material ejected by the star during several of its past outbursts. The nebula is approximately 10 000 years old, and the observed velocity of the gas is approximately 70 kilometres per second. While this nebula looks like a ring, it is in fact a hollow shell rich in gas and dust, the centre of which has been cleared by the powerful stellar wind travelling at roughly 200 kilometres per second.

Credits: ESA/Hubble and NASA, A. Nota, C. Britt

¿Qué es la energía negativa?


La creación de agujeros de gusano y otras configuraciones alojadas hoy en el reino de la fantasía requeriría una forma insólita de energía. Pero las mismas leyes de la física que permiten la existencia de esta energía negativa limitan su comportamiento.


¿Puede una región del espacio contener menos que nada?


Con sentido común, diríamos que no. A lo máximo, cabe detraer toda la materia y toda la radiación y dejar el vacío. Pero la física cuántica tiene una habilidad acrisolada, la de confundir la intuición, y no nos hallamos ante ninguna salvedad. Resulta que sí, que una región del espacio puede contener menos que nada. Su contenido de energía por unidad de volumen -la densidad de energía- puede ser menor que cero.


No necesitamos insistir en que semejante hecho acarrea consecuencias muy extrañas. De acuerdo con la relatividad general, la teoría einsteiniana de la gravitación, la presencia de materia y energía deforma la estructura geométrica del espacio y del tiempo. Lo que percibimos como fuerza de gravedad es distorsión del espacio-tiempo producida por materia común y corriente, con energía positiva. Pero cuando el espacio-tiempo se deforma por materia con energía negativa -“materia exótica”-, entonces pueden volverse posibles todo tipo de fenómenos extraños: agujeros de gusano, que pueden atravesarse, convertidos así en túneles hacia regiones remotas del universo; la propulsión a distorsión (“warp drive”), que permitiría viajar más rápido que la luz, y máquinas del tiempo, que nos llevarían al pasado. La energía negativa podría incluso utilizarse para construir máquinas de movimiento perpetuo o para destruir agujeros negros.


loading