#mayo2022
Éramos mentes desesperadas con ganas de complementarnos en algo o con alguien.
Traigo los ojos,
entre bolsas negras
que representan las pesadillas
y las pocas horas de sueño.
Traigo un café en la mano,
que hace mucho se puso helado,
manchó algunas hojas
y el mantel quedó estropeado.
Traigo una pluma,
se ha quedado sin tinta
y su punta está rota.
Traigo fotos en mi mochila,
desteñidas,
ya no se ven las risas.
Traigo música que ha muerto en silencio
y poemas que se quedaron sin dueño.
Traigo el peso de mi existencia,
un poco más liviano desde tu partida.
La mitad de mi huyó contigo,
la otra sobrevive de lo que fuimos (cuando no fuimos).
Traigo mucho
y a la vez poco.
Más poco que mucho,
siendo mucho la suma de todo lo poco.
Date cuenta qué me estoy rompiendo, y dejando piezas tiradas de mi en todas partes, no sé sí me hice daño a propósito o algo de lo que tú me hiciste me rompió.
Me puedo considerar un mago,
sabiendo que acostumbro a desaparecer de la vida de las personas,
o quizá algo más simple, solamente alguien que desea creer en la magia que hay dentro de sí mismo.
Terminar entregando todo el corazón en una simple ilusión pasajera, siempre ha sido un error que nunca dejo de cometer y del que nunca aprendo nada.
Al final todos somos aves de paso en la vida de los demás verdad?
Te vas y yo me encuentro extrañandote, queriendo saber de ti, de lo que haces en todas estas horas que no te veo, ojalá no te fueras, ojalá te quedaras.
Solo un amor y esta devoción; me llevará a verte en el “borde”…
De alguna manera nos estamos despidiendo, en los mensajes no contestados, en la falta de interés por el otro y en los largos días de ausencia.
Creo que debo irme, alejarme, dejarte en paz y quizás así ya no sea un fastidio para ti.
Eres libre; aunque siempre lo fuiste para quedarte e irte…
No quiero que te vayas, quiero más tiempo contigo pero es inevitable está despedida.
Qué golpe tan angustiante, sentir la lejanía en sus palabras, el desinterés en sus respuestas y el olvido en su corazón…
Me llenaste el corazón de tristeza con tu indiferencia.
Aquella noche estuvimos en el mismo sueño, a pesar de estar en diferentes camas.
No me nace hacer donaciones, lo que trae mi carreta son restos de mis recuperaciones, nadie me ha ayudado en las inundaciones, tampco aceptaría, no quisiera dar gratificaciones.
Estoy triste porque pronto te vas.
El baile de tu risa, es música para mis ojos.
Créditos: ig elchicodecuadros