La historia del carpaccio merece ser conocida. Es un plato aparentemente sencillo, pero tiene su dificultad. A mi me encanta! Aquí os dejo con la reseña de su origen:
“En la década de 1950, una condesa veneciana llamada Amalia Nani Mocenigo sufría de anemia y su médico le prescribió una extravagante dieta que incluía la carne cruda. A la aristócrata la idea de comerse un filete sin pasarlo por la sartén o la olla le resultaba bastante repugnante, por eso consultó con un cheff amigo llamado Giuseppe Cipriani para buscar alguna solución. Y por supuesto que el cocinero la encontró, y de la forma más deliciosa posible. Lo que hizo fue filetear en finísimas láminas un solomillo de buey y luego lo adornó con virutas de queso parmesano. A la condesa le encantó aquel plato y ambos se preguntaron que nombre ponerle a la nueva receta. Cipriani, que era un gran aficionado a la pintura encontró la inspiración en el color rojo de la propia carne y decidió bautizar su creación como Carpaccio en honor al artista renacentista Vittore Carpaccio, de quien se dice que ha sido uno de los pintores que mejor utilizó los tonos rojizos.”
“Memory’s images, once they are fixed in words, are erased,“ Polo said. "Perhaps I am afraid of losing Venice all at once, if I speak of it, or perhaps, speaking of other cities, I have already lost it, little by little.” I. C., Invisible Cities
Saint George and the Dragon (detail)- Vittore Carpaccio 1502 tempera on panel 141 cm × 360 cm (56 in × 140 in) Scuola di San Giorgio degli Schiavoni, Venice
Saint George and the Dragon (detail)- Vittore Carpaccio 1502 tempera on panel 141 cm × 360 cm (56 in × 140 in) Scuola di San Giorgio degli Schiavoni, Venice