Se con certeza que ya no estás, y que tampoco yo estoy para ti pero sin embargo en cada noche te siento junto a mi y en cada atardecer te recuerdo con la misma emoción que tú sentías al ver el cielo cambiar de color. A veces siento que podrías volver pero con el pasar del tiempo he entendido que no es así, se que la única parte de ti que me queda por amar son los recuerdos y es qué, que difícil se me ha hecho borrar parte de ellos porque aunque lo intento los pequeños detalles sobre ti siempre vuelven a mí; el olor de tu perfume favorito, tú risa de niño, tu cabello despeinado al despertar y hasta esas cosas que no me gustaban pero que con el tiempo aprendí a querer y a valorar, pero que más da, no logré comprender a tiempo que eras tú al que yo debía amar, que eras tú ese deseo que tanto le suplique a aquella estrella fugaz y que inconscientemente por estupidez mía lo deje escapar.

Y ese momento en el cual tú decidiste que ya no éramos el uno para el otro, fue él día en el que entendí que a veces ni el corazón sabe lo que quiere.

Lifestylealej

Estábamos tan cerca

pero no nos tocamos,

por miedo a reventarnos

como burbujas al viento

en una tarde de verano;

así, tercamente,

nos alejamos,

por miedo a romper

con la ilusión

de un amor perfecto

y no tener que lidiar

con su colapso.

Ausentarse a veces no es malo, porque así dejas de depender de otras personas y de otros problemas.

- Declive.

Imagina el dolor que causaste para que alejarme fuera la mejor desición.

“Lo triste es que te amo, aun sabiendo que no estoy en la más remota de tus posibilidades.”

-Gustavo Mendoza / Insomnio de UN Corazón Roto.

Hay personas que si nunca las buscas, darán por hecho que no las necesitas.

Que no haya razón para quedarse es una buena razón para irse

Nunca te odiaria por marcharte, porque un día, sin avisar, me salvaste. Y esas son de las cosas que nunca se olvidan.

Cuando dejas algo que amas.

Muere algo que eres.